Vie. Abr 19th, 2024

ApmPrensa

Agencia de Prensa APM

LA CONVERSIÓN DE SAN PABLO: 25/1/22.

3 min read

En este día donde recordamos de manera especial la conversión de san Pablo. Vamos a realzar algunos contrastes de su vida, antes y después de conocer a Cristo. Dichas paradojas se encuentran registradas en Hechos de los Apóstoles 22,3-16 y otras evidencias:

A: De su nacimiento en Tarso
B: Pasa a tener un corazón universal

A: Siendo judío
B: Se adapta a las culturas y gana a muchos para Cristo

A: Fue alumno de Gamaliel para conocer la Ley
B: Pasa a ser apóstol de Cristo, su nuevo Maestro

A: Aprendió la Ley a la perfección
B: Tradujo la Ley en propuesta de gracia

A: Persiguió a muerte a los cristianos
B: Dio su vida por el cristianismo

A: Él que hizo sufrir
B: Padeció incontables sufrimientos

A: Encarcelaba a los seguidores de Cristo
B: Él mismo dirá: “Estoy preso por causa de Cristo”

A: Fue un enérgico líder y emprendedor
B: Camino a Damasco tuvo experiencia de niño: pregunta qué debe hacer

A: Siendo un hombre de altura social
B: Experimentó la caída, el suelo

A: Creyendo que tenía la luz
B: Vivió un tiempo de oscuridad

A: Tuvo tres días sin ver, sin comer y sin beber
B: Fueron tres días de oración

A: Ananías recibió una visión de Saulo
B: Saulo recibió una visión de Ananías

A: Luego de haber llevado a Cristo al acecho
B: Empieza a llevar a Cristo en su corazón

A: Jesús fue para él un Señor desconocido
B: Ahora será por siempre el Hijo de Dios

A: Supo respirar amenazas
B: Respira permanentemente Espíritu Santo

A: Sus caminos eran para apresar
B: Sus andanzas, en adelante, para predicar

A: Del aferramiento al ritual de circuncisión
B: Comienza a promover el bautismo

A: Se relacionaba con los demás como simples “hombres”
B: Comienza a relacionarse con los otros como “hermanos”

A: Había aprendido sobre la división social
B: Promueve y fomenta la unidad en Cristo

A: Fue llamado Saulo
B: Comienza a llamarse Pablo

A: Saulo de Tarso
B: Pablo de las naciones

Señor: tenemos mucho que aprender de san Pablo. Danos la gracia del encuentro contigo. Deseamos dejarnos conducir, acompañar y orientar. No queremos estancarnos a lo que fuimos o lo que somos, sino a lo que tú has soñado para nosotros. Esta historia nuestra no termina con nuestras convicciones. Si es necesario, Señor, tíranos al suelo, déjanos como muertos que no comen, ni beben ni ven… para luego de esos tres días poder llevarte a ti en ti, Luz verdadera. Queremos ir renovados a la misión que nos encomiendas: predicar en tu Nombre, de corazón a corazón.

  1. ¿Cuáles contrastes puedo identificar en mi vida, luego del encuentro con Jesús? ¿Cómo pensaba y cómo pienso? ¿Soy consciente de esas paradojas?
  2. ¿Quién me ha acompañado para descifrar lo que Jesús espera de mi? ¿Qué he hecho, en este sentido, por las demás personas?
  3. ¿Siento en mi vida la libertad que da el Señor?