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Dios, Patria y Libertad. Nuestros lemas nacionales en el 2020.

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Las bases de nuestro Lema Nacional

1. El lema nacional dominicano es único y fue consignado en el manifiesto fundacional del movimiento La Trinitaria, que a la vez surge invocando el nombre de la Santísima y Augustisima Trinidad de Dios…Resulta evidente que los líderes forjadores de la nación, tenían plena consciencia en los vínculos inextricables existentes entre los tres elementos: Dios como fundamento último de la existencia de la Patria, y la Patria a la vez como base de la Libertad del pueblo dominicano. Esto resulta igualmente notorio en el manifiesto del 16 de Enero, así como en la Constitución del 6 de Noviembre de 1844. Más adelante, la Libertad quedaría asociada a la Verdad evangélica. La Constitución del 26 de Enero del 2010 es explícita al respecto, cuando sostiene en el artículo en el artículo 32, describiendo el Escudo Nacional :… “ lleva en el centro la Biblia abierta en el Evangelio de Juan, capítulo 8, versículo 32, y encima una cruz…” “ …Está coronado por una cinta azul ultramar en la cual se lee el lema “ Dios, Patria y Libertad.

2. El lema es parte de un conjunto de elementos que fueron escogidos cuidadosamente para destacar el carácter providencial del proyecto de República. Recordemos, por ejemplo, que fue el 16 de Julio, día de la Virgen del Carmen, el escogido para fundar la Trinitaria, movimiento que por más de 5 años preparó secretamente la acción fecunda de la independencia. (Ver para más detalles la obra de Alcides Garcia Lluberes. Duarte mismo, como fundador, estaba imbuido por un fuerte sentido de su misión providencial: “ Los providenciales, son los llamados a salvar a la Patria del infierno en que la han colocado los Cosmopolitas,los Ateos y los Orcopolitas”, expresión clarividente y de gran actualidad.

Duarte Padre de la Patria.

Podría decirse también que Duarte es el Padre de la Patria, fundamentalmente porque como Abrahan de Urs, siempre tuvo una fe inquebrantable en sus destinos, en que era una nación especialmente querida por Dios, y eso tiene que ver mucho con su condición de creyente cristiano y católico. Recordemos que el núcleo intelectual de la independencia era plenamente consciente de que Santo Domingo jugó un papel especial en la historia continental y mundial, como punto de arranque de los que se conoció como la conquista y evangelización de Las Américas.

Puestos en las manos de Dios.

3. Las probabilidades, medidas con criterios humanos y políticos, de que pudiera triunfar y afirmarse en la época una República independiente frente a un Haití dominador, con innegable superioridad material, demográfica y militar eran muy bajas, virtualmente inexistentes. También, resalta que Duarte y los Trinitarios, tenían plena conciencia de la dimensión espiritual y moral de la lucha que emprendían, toda vez, que se trataba de lograr la separación e independencia de toda potencia extranjera, después de padecer una ocupación haitiana que por diferentes medios trató de destruir los rasgos distintivos de una comunidad nacional, que tenía siglos en formación. El idioma, la cultura y la religión fueron sistemáticamente socavados por los ocupantes del régimen de Boyer, desatendiendo las advertencias que les hiciera tanto Nuñez de Caceres en 1822, como un general haitiano, sobre la necesidad de respetar aspectos esenciales de identidad de la comunidad ocupada.

La naturaleza despótica del régimen de ocupación y las marcadas diferencias culturales abonarían las condiciones para que creciera el deseo de afirmación e independencia nacional. Tiene razón Pedro Henriquez Ureña cuando destaca que la intelección de la idea nacional fue el resultado de un proceso histórico que abarca aproximadamente un periodo de 5 decenios: la independencia efímera de 1821,( después de la gesta de poner fin en Palo Hincado en 1809 a la Era de Francia en la Isla de Santo Domingo) proclamada por Nuñez de Caceres; el 27 de Febrero de 1844 y los largos años que lucha que siguieron para enfrentar y derrotar 5 invasiones haitianas; la gran revolución restauradora de 1863/1865 para derrotar al imperio español; así como la lucha revolucionaria contra el proyecto de anexión de la República por parte de Baez a los Estados Unidos.

Cómo han reconocido muchos de los historiadores, la República Dominicana ha tenido que afirmar, (las más de las veces en solitario), en diferentes contextos, sus condición de nación frente a Francia, Haití, España, EUA y el Reino Unido. Eso tiene que ver con su singular emplazamiento geopolítico: centro del Caribe, Centro del Continente. También, es importante destacar que en todo ese proceso el pueblo dominicano estuvo acompañado de su Iglesia, y de la Providencia.

Lucha por la Soberanía.

4. En el presente, la República fundada por Duarte y los Trinitarios, ha alcanzado a lo largo de su historia logros importantes en muchos ordenes, pero aún así son precarios y expuestos a perderse, por la fragilidades de su proyecto nacional. Es por eso que la lucha incesante por la soberanía y la autodeterminación, la integridad territorial y la identidad nacional constituye un elemento fundamental, que nunca debe faltar, en las luchas y afanes de todos los gobiernos, en todas las etapas históricas. La historia dominicana demuestra que, las veces que las clases dirigentes han incumplido de sus responsabilidades, propiciando con sus luchas partidarias o facciosas conflictos fratricidas; o renegado de la dominicanidad perdiendo la fe en su posibilidades , solo han favorecido las intervenciones e injerencias foráneas, o peor aún, han entregado la soberanía en negociaciones vergonzosas.

5. De ahí la importancia de cuidar la unidad interna, y respetar y fortalecer de los mecanismos de expresión de la soberanía popular, que debe ser el cimiento de la soberanía nacional. En la actualidad, a 10 años de aprobada la Constitución que fue proclamada el 26 de Enero, después de un amplio ejercicio de consultas y debates abiertos y plurales, es evidente que desde los centros de poder locales( incluido actores de los poderes públicos) y foráneos se trabaja para socavarla en aspectos esenciales. Muy particularmente, para desconocer y destruir los principios y valores asociados a la identidad de humanismo cristiano que la caracterizan. Eso ha sido notorio en los ataques sistemáticos abiertos y encubiertos, en nombre de un falso progresismo, a la vida, la familia y los símbolos patrios. Todos centrados en cambiar su identidad y menoscabar su integridad demográfica.

También en el desconocimiento del derecho de los dominicanos a definir su estatuto de nacionalidad, así como en resistir los mandatos a ampliar los mecanismos de democracia participativa, que fueron incorporados para otorgar más poder a los ciudadanos y cuerpos intermedios de la sociedad. En el presente ninguno ha habilitado. ( Referéndum, Plebiscito, Inicitativa legislativa y municipal popular, Derecho de Peticion)

Orientaciones del Ideario Duartiano.

6. Ideario luminoso de Duarte contiene muchas orientaciones que los dominicanos del presente, debemos tener muy en cuanta como guía de nuestra acción actual y futura. Propiamente, fue un visionario que nos proyecto en el tiempo, con sentido de trascendencia y búsqueda de eternidad. Propiamente tienen un valor excepcional y permanente para todas las generaciones de dominicanos. Dentro de ese ideario, particularmente, vale la pena resaltar ahora su mandato “a ser Justo si queréis ser Felices”. La libertad es un gran valor, pero sólo si viene acompañada de la responsabilidad, es auténtica y puede ser justa con los demás. Si solo se reivindica la libertad de las personas con sentido egoísta , sin reparar en que debe ejercerse tomando en cuanta a los demás, a nuestros prójimos, nuestra nación que debe integrar los intereses generales de todos los dominicanos, se convierte en libertinaje, y por tanto, en fuente de abusos e injusticias, que perturban el orden social y nos impiden ser felices.

Para Duarte ser justo era el primer deber del hombre. Muchos de los problemas y males sociales que confrontamos en la actualidad tienen su raíz en la injusticia: no hay justicia para las personas, en especial, si son débiles o pobres; y las estructuras sociales, económicas y políticas, pese a los cifras maravillosas de crecimiento anual que nos presentan como un enorme logro, no garantizan que millones de dominicanos puedan realizar sus vidas con libertad, a partir de su propia iniciativa, sin depender del favor de la política y los políticos dentro de sistemas asistencialistas degradantes.

Como muestra solo hay que reparar en el estancamiento crónico del salario real, en los niveles de principio de los 90, a la vez que se refuerzan los mecanismos de concentración de las riquezas en pocas manos, por el predominio de instituciones económicas propias de un capitalismo de carácter extractivo de rentas, no inclusivo, o como dijeran San Juan Pablo II, Salvaje. Las clases dirigentes de la nación no son justas con su pueblo que, incluso, sufre discriminaciones en su propio país, viéndose desplazados en los mercados laborales por trabajadores extranjeros en violacion a la constitución y las leyes de la República.

El Valor del Trabajo

7. Duarte fue muy consciente de la identidad existente entre la defensa de la Patria y los Intereses propios y familiares, así como acerca del valor del trabajo y la organización para hacer las transformaciones. Recordemos que dentro de sus más célebres sentencias encontramos el mandato “a trabajar por y para la patria que es lo mismo que trabajar por nuestros hijos y por nosotros mismos”… así como a trabajar sin descanso, sin perder el tiempo, confiando en la justicia de nuestra causa y en nuestros propios brazos”. Esto demuestra que aunque Duarte tenía un fuerte sentido providencial, estaba consciente que su misión y la de los suyos era ser instrumentos de la voluntad de Dios…. hacer el trabajo que Dios quiere que hagamos.

Geopolítica Actual.

8. Finalmente, es importante destacar que en el presente la República enfrenta las pruebas más complejas y adversas de toda su existencia… ahora se desarrolla un peligroso choque de potencias mundiales en el tablero del Gran Caribe, en estrecha relación con el escenario de confrontación política e ideológica entre fuerzas continentales( herencia de la guerra fría) con un alto riesgo de que la República quede atrapada en esas luchas y se convierta en teatro de esos conflictos de poderes foráneos. La situación se agrava en extremo, por la desestabilización imperante en Haití y las tendencias de los actores externos a procurar una solución dominicana o insular a sus problemas , como al riesgo alto de que la Isla sea convertida en un foco de conflictos de otros, con fuertes impactos desestabilizadores regionales y continentales.

Fuente Blog Guia de Pensamiento y Accion