Échenle agua
2 min readLa subida de la loma llamada La Pelota, desde el valle del Bao, había sido agotadora. Ya era de noche; el hambre y el cansancio trastornaban la mente.
El ánimo de todos iba en picada al llegar al Valle de Lilís, antesala del Pico Duarte.
Una vez montadas las tiendas de campaña, muchos no pudieron resistir la tentación de tirarse a dormir, mientras otros encendían el fogón y buscaban lo necesario para cocinar un chambre.
Agarrando arroz, habichuela, plátanos, cebolla y otros ingredientes típicos de la cocina criolla, todo estaba listo y la improvisada cocinera puso el piloto automático, porque ya era sólo cuestión de tiempo.
A la espera de que el chambre estuviera, nos permitimos un pequeño descanso que nos traicionó y que lamentablemente degeneró en profundo sueño. Hasta ronquidos poderosos empezaron a hacerse competencia en la noche estrellada.
De repente un grito desesperado, que procedía de una de las tiendas, nos despertó. Era una voz que, a todo galillo, decía: “Échenle agua”.
El tufo a quemado se extendía por el valle, mientras otros se sumaban al clamor que, en forma de eco, se iba repitiendo: ”Échenle agua.” ¡Tremendo reperpero! Se armó entonces una corredera en busca de agua y hasta hubo uno que, al despertarse, sobresaltado, gritó: “Llamen al 911”.
Y los galones de agua se iban vertiendo sobre la olla inocente que sólo cumplía con su deber.
En el afán por salvar lo que creíamos iba a ser un chambre para chuparse los dedos, la confusión del momento llevó a que uno de los jóvenes agarrara un galón, sin darse cuenta de que contenía gas y no agua.
Ahí fue que la puerca retorció el rabo y se supo que el gas pela, pues al recibir en su boca el líquido inflamable, la olla toda se prendió en fuego hasta convertirse en gran hoguera.
Convocados de emergencia por el Ministerio, los medios de comunicación del país empezaron a repetir en cadena: ¡Échenle agua!.
Siempre se puede aprender algo de los acontecimientos: 1-Si la cosa está que arde, duerma con un ojo abierto y otro cerrado. 2-Cuando el ambiente está muy caliente, no le eche gas, sino agua para que se enfríe.