Sáb. Jul 27th, 2024

ApmPrensa

Agencia de Prensa APM

¿DAS LA SOBRA O LO QUE TIENES?

2 min read

EVANGELIO DE HOY: 27/11/23 (Lc 21,1-4)

El pasaje de este día nos presenta el contraste que Jesús ve en el templo. Unos ricos, que echaban donativos de lo que les sobraba, y una viuda pobre, que echaba lo único que tenía, dos reales. A partir de ahí reflexionamos:

Haciendo una revisión de vida, pregúntate ¿qué has ido dando por los caminos? ¿Has ido dando lo que te sobra? ¿Qué sucede cuando das lo restante? Lo que sobra está lejos de tu corazón y no lo toca. No hablemos solo de cosas materiales. También puedes estar dando las migajas de tus conocimientos. Quizás, porque no deseas que los demás tengan acceso al banco de informaciones que has venido coleccionando a lo largo de los años, mediante formación, sacrificios e inversiones. No sabes que, mientras das lo que sobra de tus saberes, tu banco de contenidos se va pudriendo poco a poco; en desuso, se seca y caduca.

Estás dando lo que sobra si, teniendo un don, lo economizas o lo controlas para que no te molesten. Das lo restante, también cuando usas escasas palabras, en el momento que se requiere expresarte. En las ocasiones que realizas los servicios con el menor esfuerzo posible, sin ilusión ni alegría, estás dando lo que te sobra. Cuando así sucede, tus acciones y actitudes no te llevan a crecer como persona. No se talla una madera sin una sierra o serrucho.

Cuando te das por entero, tú eres como esa madera dispuesta, y el ejercicio de donación es el serrucho que te va formando en santidad de vida. Cuando das como lo hizo la viuda del evangelio, sin miedo a desapropiarte, sin interrogante ni sospecha, cuando te das desde el silencio de tu corazón, experimentas la alegría y la plenitud, porque el mismo Dios llena de gracia y bendiciones todos tus rincones vacíos.

Padre: quiero aprender de tu amor, tu amor que se nos da por entero. Si nos dieras de lo que te sobra no viviríamos. En cambio, nos has dado todo lo tuyo, tu propio Hijo Jesús. Bendito sea tu nombre santo y glorioso.

  1. Cuando Jesús te mira dando tu vida, tu tiempo, tus servicios, tus pertenencias, ¿qué estará pensando?
  2. ¿Puedes observar la diferencia en ti, cuando te dabas por la mitad, y cuando empezaste a darte por entero?